Descripción
Los quiroprácticos creen en el uso de una manera especial de mover las articulaciones (mediante un "ajuste" o "manipulación") para tratar los problemas de las articulaciones, los músculos y el sistema nervioso. Tratan personas con una amplia gama de enfermedades, incluyendo problemas de columna vertebral, cuello y hombros, lesiones deportivas, dolores de cabeza, asma y trastornos digestivos.
Actividades laborales
Aunque los quiroprácticos trabajan principalmente en la columna vertebral, evalúan todo el cuerpo y pueden tratar pacientes con una amplia variedad de trastornos o problemas, incluyendo dolor de espalda, lesiones deportivas y dolores de cabeza, puesto que adoptan un enfoque holístico para el diagnóstico y el tratamiento de cada paciente.

Intentan detectar cualquier enfermedad subyacente grave, refiriendo al cliente a su médico de cabecera o al hospital si es necesario (los quiroprácticos pueden visitar pacientes sin que hayan acudido previamente a su médico).

Utilizando sus manos, el quiropráctico siente articulaciones del cliente para encontrar donde los huesos o tejidos no están en línea. Entonces, manipulan las articulaciones para ajustarlos a su posición normal.

En una primera consulta, el quiropráctico analiza el problema del cliente y toma notas del caso. A continuación, examina el cliente y le pide, si es necesario, que se ponga de pie o que se mueva de una determinada manera para poder observar y evaluar su postura.

El quiropráctico realiza otra parte de la exploración, palpando las articulaciones de la columna del paciente y/o otras partes del cuerpo. El propósito de la exploración es evaluar el problema e identificar la parte del cuerpo que lo está causando.

Los quiroprácticos no recetan medicamentos ni realizan cirugías, por lo que el tratamiento se realiza mediante el uso de sus manos.

Después de la primera consulta, el quiropráctico puede ofrecer un tratamiento inmediato. Sin embargo, es posible que deba retrasar el inicio del tratamiento, mientras para obtener más información del paciente o esperar los resultados de las radiografías o de los análisis de sangre.

El número de tratamientos que el paciente necesita varía en función de la gravedad de su problema.

Los quiroprácticos también ofrecen asesoramiento a los pacientes, por ejemplo, sobre el estilo de vida, el trabajo y el ejercicio, para ayudarle a gestionar mejor su enfermedad o a prevenir la reaparición del problema.
Perfil profesional
Para ser quiropráctico se necesita:
  • Curiosidad sobre la ciencia del cuerpo.
  • Un enfoque lógico y analítico de tu trabajo.
  • Capacidad de escuchar a sus pacientes.
  • Disfrutar de trabajar con gente.
  • Tacto, sensibilidad y capacidad para tranquilizar a los pacientes.
  • Un buen sentido del tacto y habilidades manuales precisas.
  • Aptitud física, ya que el trabajo puede resultar agotador, especialmente si hay que hacer visitas a domicilio.
Si trabaja por cuenta propia necesitará habilidades para los negocios.
Competencias
  • Amable.
  • Aptitudes para la escucha.
  • Asesora a personas a decidir el tratamiento a seguir.
  • Capaz de prestar atención al detalle.
  • Deriva a pacientes a otros especialistas médicos.
  • Dirige un consultorio.
  • Discreto.
  • Empático.
  • Emprende y lleva su propio negocio.
  • En forma físicamente.
  • Habilidad para el marketing.
  • Habilidades comunicativas.
  • Habilidades prácticas.
  • Observador.
  • Paciente.
  • Proporciona asesoramiento.
  • Se encarga de la gestión presupuestaria.
  • Sensible.
  • Toma historias clínicas detalladas, holísticas.
  • Trabaja con clientes de diferentes tipos.
  • Utiliza rayos X para diagnosticar.